Si estás embarazada por primera vez es más que probable que sientas algo de incerteza por todo lo que va a venir en los próximos meses. Hay mujeres afortunadas que durante su embarazo no sienten molestias de ningún tipo y que notan que están embarazadas por la ausencia de regla y por que el vientre les empieza a crecer. Pero otras mujeres en cambio, pueden tener muchos de los síntomas normales de embarazo y que se encuentren, verdaderamente mal.
Piensa que no estás enferma
Todo el mundo te dirá que no estás enferma, que ‘solo estás embarazada’. Pero lo que olvidan muchas personas (o que te dicen aquellas que no tuvieron síntomas en su embarazo), es que muchas mujeres se sienten durante los primeros meses del embarazo como si estuvieran enfermas la mayor parte del día. Las molestias, el mal cuerpo, las náuseas, los vómitos, el dolor de cabeza… Muchas mujeres embarazadas se pueden sentir totalmente indispuestas (y aún así seguir haciendo vida normal porque no les queda otra).
Si en algún momento sientes que realmente te encuentras muy mal, sangras, o notas síntomas que no son normales acude inmediatamente a tu médico. Más vale ir al médico y que te diga que todo es normal a quedarte con la duda y que no estés del todo bien.
La ropa de maternidad tiene importancia
Hay mujeres que cuando pasa el segundo mes de embarazo ya empiezan a notar como su ropa empieza a apretarles el vientre y esto, en ningún caso es beneficioso. La ropa de maternidad no tiene que ser fea y además, es muy importante que te sientas bonita siempre que te mires en el espejo. No es necesario que te gastes demasiado dinero en comprarte muchos modelitos, lo que importa es que tengas para cambiarte. Recuerda que la ropa de maternidad tan solo te durará unos meses.
Lo ideal es comprar un par de pantalones con banda de vientre y camisas largas. En el tercer trimestre quizá necesites comprar ropa con tamaño más grande. Puedes comprar por etapas y así ahorrar dinero mientras te sientes cómoda los nueves meses de embarazo.
No busques demasiado en Google
Hay historias de embarazo que dan miedo por todos sitios, historias que muestran la tristeza y el desconsuelo de la pérdida de los bebes. También puedes encontrar historias que nada tienen que ver contigo pero que te hacen dudar de tu salud. No busques en Google síntomas extraños que son normales cuando estás embarazada y si tienes dudas, lo mejor será acudir a tu médico. Te sentirás mucho más tranquila.
No te obsesiones con el aumento de peso
Vas a aumentar de peso, eso tenlo por seguro, así que no merece la pena que te obsesiones con eso. El embarazo no es una vía libre para comer todo lo que quieras, y tampoco debes comer por dos. Pero tampoco es necesario que cuentes las calorías o que debas preocuparte por cada gramo que cojas. Habla con tu médico si es necesario para asegurarte de que estás siguiendo todos los consejos en cuanto al peso que deberías coger o el peso que deberías tener.
El ejercicio es buena idea
Si no has hecho ejercicio antes del embarazo, no tienes que ponerte a hacerlo de forma intensa… Y si quieres hacerlo, lo ideal es que lo consultes con tu médico. Si tu médico te dice que puedes hacer ejercicio, entonces, adelante. Aunque para estar bien en el embarazo no es necesario ir al gimnasio ni hacer varias horas de deporte… Con caminar 30 minutos a paso ligero cada día, marcará la diferencia en tu salud. Esto te ayudará a sentirte mejor y además, te sentirás más fuerte cuando tengas que hacer el trabajo del parto.