Se puede llegar a engordar de 9 a 14 kg. sobre el peso inicial, y el 95 por ciento de los recién nacidos pesan sólo entre 2.500 y 4.500 gramos, ¿cómo es posible?
El aumento de peso depende mucho de cada embarazada. Si empiezas el embarazo con sobrepeso, el ginecólogo controlará más tu evolución, por lo que puede que engordes menos. Si tienes tendencia a retener líquidos aumentarás más de peso, y lo mismo sucede si vas a tener mellizos o trillizos.
De estos kilos, el feto acapara entre 3 y 4. El resto se debe a la retención de líquidos por el organismo y al incremento del volumen de sangre, al crecimiento de los pechos, a la placenta, el líquido amniótico, el útero y las reservas de grasa, proteínas y sustancias nutritivas por parte de la madre. Dicho esto y, lejos de entrar en pánico, la alimentación en el embarazo debe ser equilibrada, variada y aportar todos los nutrientes necesarios para el desarrollo del bebé.