Todos los padres y madres adoran el momento de la llegada un niño, y si son mellizos, la felicidad es inmensa. Sin embargo, algunas veces, una noticia puede empañar ese momento de alegría.
Louise Johnson es una joven madre de Telford, en Reino Unido dio a luz a dos niños mellizos, uno de los cuales nació con Síndrome de Down. Normalmente, el Sindrome de Down se da en embarazos simples o se da en ambos bebés si son mellizos.
Todo el embarazo de Louise fue normal y no tuvo ningún contratiempo, el único detalle inicial fue que los bebés llegaron con solo 34 semanas de gestación y uno de los mellizos nación con Síndrome de Down.
Un suceso que pasó luego del parto, fue que Louise ni bien nacieron los mellizos y al darse cuenta los médicos que uno de ellos tenía Síndrome de Down, le preguntaron a la madre si quería darlo en adopción. Louise se sorprendió de la pregunta, pero fue muy clara y segura en su decisión de nunca darlo en adopción.
«Cuando me consultaron por primera vez si aún quería llevarlo a casa, me tomo un minuto comprender lo que me estaban pidiendo. Estaba aturdida…jamás se me había pasado por la cabeza ni por un mini segundo que alguno de mis mellizos no vuelva a casa. (…) Cuando los observo, lo único que veo son dos hermosos niños pequeños que se adoran entre sí y a su familia», dijo Louise al diario británico The Sun.
Según lo que comenta la madre, es muy común que los bebés que llegan al mundo con Síndrome de Down no los quieren los padres y los dejan en una casa de servicios especiales. Dada esta tendencia, el médico le hizo la consulta, sin embargo minutos después le pidió disculpas por la pregunta de si quería dejar al bebe Jacob.
Luise quizo hacer público y contar esta historia, con el objetivo de concientizar sobre esta enfermedad. A la vez comentó que estaba preocupada por muchos bebés que les detectan el Síndrome de Down cuando están en gestación, ya que muchas madres toman la decisión de abortarlos o entregarlos en adopción.
Esta hermosa madre comentó que no tiene problemas con sus mellizos, que no hay que tener miedo a tener un hijo con Síndrome de Down. «Tener un hijo que tiene el síndrome de Down, es tener un niño exactamente como tú y como yo (…) Sé que no podría vivir sin él. Incluso si hubiera sabido antes del nacimiento que Jacob tenía la enfermedad, de ninguna manera me hubiera deshecho de él. Lo amo con todo mi corazón.»
Los niños Thomas y Jacob se divierten juntos y ambos se ayudan en todo. Luise les da todo a sus hijos, y no le importa si los señalan como diferentes. Ella los ama por igual y los cuida siempre.
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