Adaptarte a tu nueva vida puede resultar complicado. Nosotros te ayudamos a disfrutar de esta hermosa etapa.
1. No te preocupes si subiste un poco de peso. Durante las primeras semanas es algo que no puedes evitar. Adopta hábitos sanos, realiza varias sesiones de ejercicio semanalmente y disfruta de estos momentos en compañía de tu bebé.
2. Evita que te visiten con mucha frecuencia. Tu bebé definitivamente es la sensación del momento, pero lo mejor es que te aisles un poco de la vida social. Descansa, piensa en tí, date tu espacio y poco a poco vuelve a tu rutina de vida normal.
3. Sentirte triste es normal. Tu estado de ánimo debe estar alterado, no te preocupes por eso. Las primeras semanas luego de dar a luz a tu bebé sufres cambios hormonales importantes, es muy común que llores, que te pongas de mal genio y que en ocasiones no quieras ver a nadie.
4. Dormir es importante. Mientras que tu y tu bebé se acostumbran a esta nueva vida, disfruta de todos los espacios que tengas para disfrutar del silencio, descansa mientras el nuevo integrante de la casa está también recuperando energía. Es importante que tu cuerpo esté en reposo para así lograr una armonía total.
5. Acude a tu familia. Una ayuda extra no está de más. Tu pareja puede convertirse en tu mejor cómplice. El cuidado del bebé debe ser mutuo, si programan horarios en donde ambos aporten a la causa, la llegada del bebé será mucho más fácil de llevar.
6. Comparte tu experiencia. Hablar con otras mujeres que están atravesando por la misma etapa que tu es como sentarte a hablar contigo misma. Pueden intercambiar consejos, emociones y se sentirán identificadas las unas con las otras.
7. Documenta tu embarazo. No hay nada más especial en la vida que guardar estos bellos momentos, te servirán de apoyo para futuros embarazos, es muy probable que no cometas los mismos errores que en un momento determinado pudiste evitar.
8. Involucra a tu pareja en el proceso. No tengas miedo de hacerlo, el también debe aprender lo que tu estás aprendiendo. Cambiar pañales, preparar un tetero, levantarse en la madrugada a supervisar al bebé, cosas que no son solo de mujeres.
9. Toma clases de preparación para el parto.
10. Pide ayuda. Recuerda que no te las sabes todas. Si no cuentas con tu familia porque no están en la ciudad, es importante que recurras a terceros esta etapa no la puedes vivir sola.